Todo

Nada,
sin un instante de piel,
aquélla que elevas de perfume mil cabellos
entre dedos temblorosos.
Nada,
sin la eternidad del suspiro
aquél que anticipa un ávido beso,
entre miradas encontradas.
No hay nada,
sin el descanso de tu voz en mis labios,
aquéllos que de luz colman mis ojos,
entre desnudos exaltados.

Comentarios

  1. Deberias volver a publicar algún escrito. Son muchos meses sin compartir nada con nosotros y se te echa de menos.

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