No quedan
No quedan letras sino besos entre los que busco mil sonrisas que me oigan gritarle al olvido lo que soy y a las lágrimas vengan a secar, aquellas manos que muero por tocar. No quedan palabras sino miradas entre las que me oigo suspirar cada vez que trato de encontrar, aquellos ojos que muero por mirar.
Qué bonito Jorge!!
ResponderEliminar